La temporada pasada marcó el desarrollo profesional de Sofia Goggia. La esquiadora italiana sufrió un grave percance en uno de sus entrenamientos, tras el que quedó fuera de competición de forma prolongada. El percance ocurrido en su entrenamiento diario se saldó con la fractura de su tibia y el tobillo afectado de gravedad. Por aquel entonces, la promesa de la deportista fue que iba a regresar con más fuerza, al son de “resucitaré”, y así ha sido. La italiana ya está lista de nuevo y su vuelta al circuito profesional por primera vez tras ese parón forzado es ya una realidad.
A pesar de su vuelta, no le ha sido nada fácil en absoluto. La lesión ha sido un quebradero de cabeza, tanto para ella como para los médicos, que no estaban seguros de cómo afrontar la situación. “La fractura fue muy complicada”, describe ella en una rueda de prensa online. “Los médicos no sabían cómo reconstruir los huesos”, añade la italiana. Ahora, ya se ha recuperado de su calvario y está preparada para volver a hacer lo que más le apasiona, como publica el medio alemán Blick.
Una dura lesión en su mejor momento
Como suele ser costumbre en el deporte, los problemas de lesiones llegan en los momentos en los que el atleta está en su punto más álgido. Parece ser una pequeña maldición que rompe con el punto prime de aquellos que están en un gran despunte. Aunque no siempre tiene por qué ser así, este ha sido el caso de Sofia Goggia. En el instante de su caída, la italiana había conseguido seis puestos en podios y estaba líder en el ranking, que se vio frustrado tras ese entrenamiento fatal.
En su recuperación, los avances fueron de poco en poco y con alguna que otra complicación. “No pude caminar durante 45 días”, rememora la italiana. Pero desde entonces, todo ha ido a mejor y su pierna está “muy bien”, tras un proceso de rehabilitación exitoso y poco doloroso, según ha detallado la deportista. “Pensé que estaría más asustada”, describe, tras llegar al final de su etapa de recuperación.
Su familia, un pilar fundamental
La italiana ha querido tener un gesto con aquellos que han estado junto ella en los peores momentos de su carrera reciente. Una de las personas que más fuerza le ha transmitido en todo el proceso ha sido su madre, a la que ha dedicado un cariñoso mensaje en sus redes sociales. “Guarda tu sueño en tu corazón: siempre me dedicaste esta frase, la escribiste en tarjetas de felicitación o me la susurraste al oído antes de ir a competir”, reza su escrito en Instagram. “Ella sintió mi cansancio, mi oscuridad interior”, añade a la dedicatoria.
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Así, la deportista ya ha regresado a la competición y ha dejado otra frase de esperanza e ilusión. “Este sueño vuelve a estar muy vivo en mí”, afirma la esquiadora, que sigue en busca de alcanzar todo aquello que cuando era una niña pensó que podía llegar a conseguir.