El nuevo Informe de Calidad de Vida 2025 de Vistage Argentina revela un escenario complejo para los empresarios locales. Si bien el estereotipo sugiere que su vida es puro trabajo, los datos muestran matices interesantes: la mayoría dedica muchas horas a sus empresas, pero valora profundamente el tiempo con la familia y sus actividades personales.
El estudio, que relevó a 536 empresarios de entre 29 y 60 años, indica que un 43% trabaja entre 40 y 49 horas semanales y un 18% supera las 50 horas. Aun así, más de la mitad de los consultados (57%) se siente conforme con esa carga laboral y un 52% disfruta genuinamente de su trabajo.
Sin embargo, el informe también refleja el costo silencioso de la productividad permanente. El 59% responde mensajes y temas laborales fuera del horario de trabajo y un 65% admite sentirse medianamente estresado, lo que podría anticipar futuros problemas de salud mental si esa sensación se profundiza.
En el plano familiar, el 46% comparte entre 2 y 4 horas diarias con sus seres queridos, y un 69% dice disfrutar mucho ese tiempo, aunque un 27% reconoce que la cantidad de horas le resulta apenas suficiente. Aquí emerge el desafío más recurrente de los líderes: equilibrar las exigencias de dirigir una empresa con la necesidad de cultivar vínculos que trasciendan lo productivo.
El área personal muestra datos igualmente reveladores. Solo un 25% dedica de 2 a 4 horas semanales a actividades que no sean trabajo ni familia, aunque un 72% disfruta mucho de esos momentos. A su vez, un 49% duerme 7 horas diarias y el 92% tuvo vacaciones en el último año, un indicador positivo frente a la crisis de descanso que afecta a otros sectores.
Finalmente, los empresarios consultados evaluaron el impacto de Vistage en su calidad de vida: el 75% percibe un impacto positivo o muy positivo y el 55% considera que esta red de acompañamiento y formación los ayudó a lograr un mejor balance entre su vida personal y profesional.
En un país donde el contexto económico desafía cada día la resiliencia empresaria, este informe confirma que el bienestar de los líderes es una variable estratégica. La productividad no puede medirse solo en horas trabajadas: la salud física, emocional y relacional es la base sobre la que se sostiene el liderazgo sostenible. Y, como reflejan los datos, ningún éxito profesional compensa el vacío de no disfrutar el camino.
por R.N.